Más que a Imelda

Con mi segunda incursión en el mundo del videoblogging empiezo a comprobar que además de cocinar y comer; leer y escribir; decorar y redecorar; charlar y escuchar; ser casera y viajar... me gusta la cámara! Sí, grabar, experimentar y editar. Aunque, por el momento, puede que debido a mi falta de dominio, este arte aún no consigue cautivarme tanto, tanto como los zapatos!

Dicen las malas lenguas (o las buenas, vaya usted a saber) que Imelda Marcos dejó en su vestidor más de mil pares de zapatos cuando se vio obligada a salir de Filipinas tras la estela de su esposo, el ex presidente Ferdinand Marcos, tras su caída del poder. 

No me gusta la ostentación, ni los personajes controvertidos. 
Pero, ¡qué se le va a hacer! A mi me gustan los zapatos más que a Imelda.

Agradecimientos a Capo, Mónica, Pasito, Pasita y a Bolo (el perro carabina), y a Zaz, por su canción Je veux.